Cuando lo sueñas, cuando comienzas a imaginarte lo que vas a hacer, los lugares que conocerás, la gente amiga que seguro visitarás….

Otro día te atormentas pensando qué ropa debes llevar para el frio o para el calor y si tienes una salida elegante….

Viajar es una de las tantas alegrías de la vida, bien vale el esfuerzo de invertir en ¡unos días para mí! Si unos días para sentirme dueña de todo mi tiempo, para cansarme de caminar, de ver, de reír y acostarme con la satisfacción de haber disfrutado lo suficiente y con la alegría que tengo de estar otro día más de viaje.

Recuerdo como empezó, primero tomar la decisión, lo que implica destinar parte de los ingresos para comprar un boleto y planificar una estadía; opciones y ganas se juntan hasta lograr la combinación posible. Ya tengo una fecha, un lugar y un boleto, comienza mi viaje. Los días se hacen cortos para planificar, ya me imagino preparando el equipaje, que no se me olvide nada: zapatos cómodos, un mapa de la ciudad y los cuentos que he escuchado “no dejes de ir a tal sitio, visita tal plaza, come de esto y de aquello”

No dejes de hacer lo que en tantos días de preparación visualizaste, agarra el vuelo de tu imaginación y has tu equipaje oportuno para hacer de tu viaje una experiencia memorable. ¡Buen viaje desde que lo sueñes!

 

Celeste F.